Josie tiene 11 años y recientemente tuvo la ceremonia de boda más maravillosa de su vida, gracias a su padre, Jim Ketz. Aunque parezca extraño, todos estuvieron de acuerdo con esta ceremonia, y muchos acudieron a acompañarlos e incluso tomó estado público y fue publicado en varios medios.
La verdad es que el padre de Josie, de 62 años, se encuentra en etapa terminal de cáncer de páncreas. Por lo tanto, sabiendo que no llegará al día en que realmente su hija se case y sea momento de acompañarla en su recorrida nupcial hasta el altar, decidieron efectuar la ceremonia como si fuese el día de la boda
Aparentemente la idea provino de la fotógrafa que fue contratada para tomar la última foto de familia de los Ketz, al saber que se aproximaba el cumpleaños de Josie. Qué mejor regalo de cumpleaños, pensó. De inmediato la sugerencia fue aceptada y se hicieron los preparativos rápidamente, en apenas 72 horas. Así, la pequeña Josie, en un estupendo vestido de novia, maquillada y peinada para la ocasión –todo hecho por gentileza de diversas firmas y profesionales– disfrutó de ese momento inolvidable, del brazo de su padre por la alfombra nupcial.
Durante la emotiva ceremonia, el pastor Gary Calbraith dijo: “Tu padre tal vez no te vea al momento de casarte, pero aquí está hoy, para conducirte hacia el altar”. Y los declaró oficialmente “padre e hija”.