Si hay una pregunta que SIEMPRE me hacen es esta. En caso de que está también sea está su duda o conoces a alguien que está en este dilema, vamos a conversar un poquito sobre esto. ¿Estás con miedo de la respuesta? ¡Relájate! Tal vez te sorprenda ¡Vamos!
La primera cosa a preguntar es: “¿Por qué quiero estar de novia?” ¡Piensa! ¡No sientas, apenas piensa! Si la respuesta es algo como: “Porque ya tengo ´x´ años y todas mis amigas ya estuvieron de novia, ya tuvieron relaciones sexuales con sus novios y yo aún ni besé a alguien, ¡estoy sufriendo bullying! Algunos chicos quieren estar conmigo y siempre les digo que no. Ok, va! Ya estuve con algunos chicos de mi escuela pero mi madre no lo sabe! Ella nunca lo permitiría! Hay un chico en mi iglesia que me parece lindo, en realidad creo que es maravilloso! ¿Por qué no salir con él? ¿Solo porque estoy en la escuela? ¿Y mi madurez? ¿Y mi opinión sobre eso? Mejor de la iglesia que del mundo, ¿no es cierto?
¡Calma! ¡Una cosa por vez!
Primero, nadie aquí está diciendo que no puedas estar de novia (a pesar de que tu madre siempre te recuerda eso) ¿Cuántos años tienes? Si estás en el colegio, supongo que tienes entre 12 y 16 años. Pero la cuestión aquí no es tu edad, ¡es la madurez! Si quieres ponerte de novia solo por el hecho de estar de novia, respeto tu opinión y no te juzgo por eso. Pero quiero dejar claras algunas cosas!
Supongamos que comiences a salir con alguien, ¿y ahí? ¿Por cuánto tiempo vas a estar de novia (de forma cristiana) hasta casarte? Primero, ¿pretendes casarte con tu novio? ¿Vas a estar de novia 5 años? 7? 10? 15 años? ¿Tienes fe para eso? ¿O quieres salir con varios? Tener experiencias con varios chicos: más jóvenes, más viejos, altos, bajos, de la iglesia, de la escuela… Entonces me dices: “No, no quiero estar de novia, ¡solo quiero salir!” ¡Ah, claro! ¡SOLO quieres salir! ¿Y con cuántos hasta entender que estás perdiendo tu valor? ¡Cuando naces, eres como un vaso limpio! ¡Nunca fue usado! ¡Totalmente esterilizado! Ahí viene alguien y quiere usar ese vaso. ¿Quién es el vaso? ¡Tú! ¿A quién le cabe la decisión de dejarse usar o no? ¡A ti! (“No, ¡es de mi mamá!” ¡Todo bien! Pero que sucederá cuando ella no te esté mirando? Qué va a impedir estar con aquel chico de la escuela?)Tu conciencia manda más en ti que tu propia madre o cualquier otra persona, ¡y esta es la importancia de tener una conciencia regida por Dios!
Si quieres estar de novia, debes quererlo porque tienes la pretensión de casarte con aquella persona! ¿Por qué entonces no comienzas a observar a ese chico, en vez de querer comenzar a salir con él? Obsérvalo y ora a Dios. ¡Piensa! ¿Tu madurez alcanza para casarte? ¿Y la madurez de él? No salgas con uno u otro solo porque sí! Tú, aquel vaso limpio y puro, te transformarás en un vaso usado, lleno de marcas de boca, sucio! Nadie quiere un vaso así, ¿tú lo quieres? ¡Date valor! Eso forma parte de tener comunión con Dios! Allá en tu escuela, sé diferente de las chicas de tu clase que no tienen más esa pureza, esa virtud! Y en caso que hayas estado con algunos chicos o incluso hayas perdido tu virginidad, pero crees que realmente vale mucho más valorarte y entregarte a quien realmente Dios separará para ti en el momento correcto, toma la decisión de resistir la propuesta del diablo y sé fuerte! No ganas nada siendo tan fácil y carente con todos los que aparecen, ¡solo tu pierdes! ¡Deja de estar con uno y con otro! Cuando venga la propuesta, ¡huye, corre! El diablo te dará mil propuestas (y generalmente bien tentadoras!), pero Dios te da la promesa. ¿Qué eliges? ¡Sé diferente, blíndate!