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viernes, 19 de diciembre de 2014

Hay personas que tienen pareja pero se sienten tan solas y vacías como si no las tuvieran.
Hay otras que por no esperar deciden caminar al lado de alguien equivocado y en su egoísmo, no permite que ese alguien se aleje aun sabiendo que no le hace feliz.
Hay personas que sostienen noviazgos ya destruidos, por el simple hecho de pensar que están solos es difícil e inaceptable.
Hay personas que deciden ocupar un segundo lugar tratando de llegar al primero, pero ese viaje es duro, incomodo y nos llena de dolor y abandono.
Pero hay personas que están solas y viven y brillan y se entregan a la vida de la mejor manera, personas que no se apagan, al contrario, cada día se encienden mas y mas. personas que aprender a disfrutar la soledad porque las ayuda acercarse a si misma, a crecer y a fortalecer su interior.
Esas personas son las que un día sin saber el momento exacto ni el por que se encuentran al lado del que las ama con verdadero amor y se enamoran de una forma maravillosa.

viernes, 12 de diciembre de 2014


  1. Le pedi fuerzas, y Dios me dio dificultades para hacerme fuerte. 
  2. Le pedi sabiduria, y Dios me dio problemas para resolver.
  3. Le pedi prosperidad, y Dios me dio un cerebro y fuerza para trabajar.
  4. Le pedi valor, y Dios me dio peligros para vencer. 
  5. La pedi amor, y Dios me dio personas aproblemadas para ayudar. 
  6. Le pedi favores, y Dios me dio oportunidades. 
  7. Recibi nada de lo que deseaba, Recibi todo lo que necesitaba.

viernes, 28 de noviembre de 2014

40 cosas extrañas que suceden cuando tu novio es tu mejor amigo

1. Él te ve como realmente eres. Te ha visto justo antes de acostarte, con el delineador de ojos corrido. Te ha visto en todas tus versiones. En realidad es ridículo lo mal que te has visto cerca de él y lo poco que te importa.
2. Se sienten tan cómodos con el otro que la vergüenza ya no existe.
3. Se saben de memoria los conjuntos de ropa del otro. “Estoy usando la camiseta granate”. “¿Con los pantalones cortos de color canela y el reloj marrón?”
4. Han tenido momentos en los que sienten que no pueden soportar a nadie, excepto a ustedes.
5. Sus familias se sienten muy cómodas con ustedes, tanto que ya no se contienen de nada.
6. Ustedes se obsesionan con ciertos restaurantes y alimentos durante diferentes períodos de tiempo.
7. Ustedes dos tienen demasiados chistes internos que nadie más entiende.
8. Incluso tienen dichos y frases, por lo que básicamente han creado su propio lenguaje.
9. Saben al instante si el otro se va a interesar por algo. Por lo tanto, se envían constantemente videos y artículos que al otro le gustarán.
10. Se conocen tan bien, que saben inmediatamente si el otro está haciendo algo turbio o actuando de forma extraña y misteriosa.
11. En realidad, ni siquiera se preocupan de que el otro haga algo extraño.
12. Él conoce todas las historias de tu círculo en el trabajo y de amigos. “¿Ella hizo qué? Amor, lo siento, pero ya sabíamos cómo era ella”.
13. Estás tan acostumbrada a todos sus hábitos asquerosos que ahora te parecen encantadores.
14. Han habido muchas veces en las que se ríen de forma incontrolable sobre algo.
15. Tienen programas de televisión que ven juntos, y si uno de ustedes los ve sin el otro, puede empezar la Tercera Guerra Mundial.
16. Sus preferencias de comida se han vuelto muy similares.
17. Tienen pequeñas tradiciones muy peculiares.
18. No tienen que hablarse las 24 horas para saber que están en la mente del otro. En realidad, pueden estar sin comunicarse un tiempo y estar completamente bien.
19. Él termina sabiendo mucho más acerca de tu ciclo menstrual que lo que cualquier otro chico debería tener que saber en su vida.
20. Son profesionales en siestas y abrazos.
21. Tienen muchas fotos juntos. Y se han vuelto mucho más ridículas y torpes con el tiempo.
22. Han pasado vergüenza en público en más ocasiones de las que quisieran admitir.
23. Han salido sólo los dos y lo han pasado increíble.
24. Crees que sus movimientos de baile son impecables.
25. Han jugado juegos de mesas y se han puesto sumamente competitivos, al punto de que han sentido ganas de matarse mutuamente.
26. Cuando pelean mucho, terminan riéndose.
27. Han hecho juntos algunas cosas bastante infantiles, como construir fuertes o inventar juegos ridículos.
28. Él no te toma en serio cuando te vuelves loca sobre cosas que él sabe que realmente no te importan.
29. Pueden estar en una habitación llena de gente y establecer contacto visual en el momento exacto en que reconocen que alguien ha dicho algo estúpido.
30. Ustedes han tenido un par de combates de lucha libre en el suelo.
31. Se conocen los gustos musicales demasiado bien, incluso cuando no les gusta para nada lo que el otro escucha.
32. No les gustan mutuamente ciertas personas. A los dos les puede caer pésimo alguien y lo evitan como la peste.
33. Tienen un montón de ideas sobre nuevas aficiones y experiencias. Es probable que incluso hayan hecho listas.
34. Dominan a la perfección los viajes largos en coche.
35. No tienen problema en decirse cuando piensan que el otro está siendo un gran idiota.
36. Aman a las mascotas del otro como si fueran las suyas. Y si ustedes tienen una mascota juntos, se convierte en sagrado para los dos.
37. Muchas veces cantan y bailan como locos. Hay videos incriminatorios.
38. Los regalos que se hacen pueden ser genuinamente especiales o francamente ridículos.
39. Los dos saben exactamente cuándo es el momento de servirse otro vaso, ordenar comida para llevar y darse besos realmente grandes.
40. En el fondo, los dos saben que a pesar de todas las tonterías, lo que tienen es un hallazgo raro y especial. El amor duradero es aquel que se construye en torno a la pasión y a la amistad verdadera. Sabes que te has ganado el premio gordo con él.

viernes, 17 de octubre de 2014

¿COMO SALIR DE LAS DEUDAS?


“Adelgace” sus deudas y “engorde” su bolsillo.
Gastar de más igual que comer de más, es un proceso que empieza en forma gradual. Así como podemos olvidarnos de verificar nuestro peso con regularidad, también podemos omitir la tarea de revisar nuestro saldo bancario. Resulta sumamente fácil no establecer presupuestos para el futuro, dejar que se acumulen los intereses de las tarjetas de crédito, o empezar a pagar con una el saldo deudor de otra.
“Cuando no abrimos los sobres que sabemos que contienen facturas y cuando evitamos hablar de asuntos de dinero con nuestra pareja, nos encontramos ante otras señales de advertencia de que estamos gastando demasiado”, dice la consultora financiera Marie Jennings.
Antes de que nos demos cuenta, ya estamos endeudados. Y de manera parecida a lo que ocurre con la obesidad, las deudas nos provocan estrés y nos hacen sentir infelices.
“Enterrar la cabeza en la arena no resuelve los problemas. Es preciso hacerles frente”, asegura la consultora Jennings. Para ello, necesitamos un plan estructurado – una “dieta” financiera — que nos indique qué hacer y cuándo hacerlo.
Empiece por medir la “obesidad” o deuda, de la que se quiere desembarazar. Consigne en un papel su situación económica general: los valores que posee, los ingresos que percibe, sus ahorros, las deudas contraídas…, todo. Calcule cuánto dinero obtendrá en los próximos seis meses y determine cuánto debe destinar a los gastos esenciales. Luego diseñe un plan de gastos realista que le permita ir pagando sus deudas, aunque sea con cantidades pequeñas. Salde primero las deudas más importantes, como la hipoteca.

Ahora, ¡empiece la dieta!

Primer mes
  • Durante un plazo mínimo de una semana, lleve un meticuloso registro diario de todo lo que gasta. Le sorprenderá ver que las cantidades pequeñas suman un montón de dinero que se le escurre entre las manos.
  • Establezca un límite diario o semanal de gastos. Cuando salga de casa, lleve exactamente la cantidad prevista – para sufragar sus gastos de trasporte y sus compras —  y resista la tentación de excederse usando las cajas bancarias automáticas o las tarjetas de crédito.
“Si es necesario, recurra a la cirugía plástica radical: ¡haga pedazos las tarjetas de crédito!”, aconseja Alison Mitchell, autora de Your Money Straight and Simple (“Su dinero simple y llano”).
  • No salga de compras cuando esté cansado o tenga hambre; lo más probable es que gaste dinero en cosas que en realidad no necesita. Si está fatigado, siéntese o recuéstese con los pies en alto. Como antes de ir al supermercado.
  • Hable con sus acreedores. Elizabeth Stanton, experta en cuestiones de crédito, explica: “Sus acreedores no sabrán que usted tiene un problema a menos que se lo comunique. En estos tiempos difíciles, es posible que le tengan consideración y le permitan renegociar su deuda”.
  • Converse con el gerente de su banco. “Nos parece muy importante que nuestros clientes hablen con nosotros de su situación lo más pronto posible”, dice el banquero Denis Piggott. “Queremos que se acerquen a nosotros antes de que se sobregiren, no después”.
  • En principio, no pida nuevos préstamos. Como señala Alison Mitchell: “Si alguien le ofrece crédito, de hecho lo está invitando a endeudarse”. Pero, dependiendo de sus ingresos y de su grado de endeudamiento, a largo plazo podría ser sensato obtener un préstamo bancario con una tasa de interés más baja que la de una tarjeta de crédito, a fin de pagarles a sus acreedores. Tal vez le resulte más fácil manejar esa deuda única.
  • Averigüe si alguno de sus amigos tiene problemas financieros similares a los suyos y bríndense apoyo mutuo. Llámense por teléfono y reúnanse con regularidad para cerciorarse de que no están gastando de más a escondidas.
Segundo mes
Sus deudas ya deben haber adelgazado. Si no es así, revise sus egresos con mayor rigor.
  • ¿Gasta demasiado en comida? Examine la posibilidad de llevar al trabajo sus propios sándwiches o una ensalada. Quizá pueda adquirir menos alimentos preparados, o comprar al por mayor. Planee un menú semanal a base de ingredientes baratos y dése el tiempo necesario para preparar las comidas: así no tendrá que recurrir a los platillos ya elaborados, que resultan caros.
  • ¿Desperdicia energía eléctrica o gas? Use las lavadoras de vajilla o de ropa sólo cuando tengan cargas completas. No deje su calentador de agua en “automático” todo el tiempo; enciéndalo cuando vaya a necesitar agua caliente.
  • Revise su recibo de teléfono. Algún miembro de su familia podría estar haciendo llamadas muy largas. Pida a todos en su casa que efectúen sus llamadas de larga distancia en los horarios y los días en que las tarifas son más bajas.
  • ¿Sus seguros le proporcionan ventajas? ¿No le convendría más inscribirse en el programa de seguros de gastos médicos de su empresa que asegurarse por su cuenta?
  • Revise sus contratos de servicio de aparatos electrodomésticos cuando llegue el momento de renovarlos. ¿De verdad los necesita, o podría ahorrar ese dinero para pagar alguna reparación cuando se requiera?
  • Haga limpieza de sus armarios y organice una venta casera informal de todo lo que no necesita; use el dinero recaudado para abonarlo al pago de una deuda.
Segundo año
Sus deudas ya deben estar saldadas o bajo control. Recompénsese – dentro de su presupuesto, claro está – yendo a cenar a un restaurante o planeando unas vacaciones.
Empiece a ahorrar con regularidad, aunque al principio las cantidades sean pequeñas. Y considere la conveniencia de volver a usar una tarjeta de crédito si eso le brinda la oportunidad de conservar su dinero más tiempo (en una cuenta que devengue intereses). Pero asegúrese de que puede pagar su saldo deudor cada mes…, ¡y hágalo!
Como sucede con todas las dietas, hay que estar muy atentos para no reincidir en los malos hábitos.

7 MANERAS DE AHORRAR TIEMPO


Cada día nos cuesta más trabajo encontrar tiempo para disfrutar la vida. Sin embargo, algunas de las personas más ocupadas y activas del mundo se las arreglan para desempeñarse con éxito en su profesión y a la vez disponer de tiempo para estar con la familia, descansar y divertirse. A continuación presentamos al lector los mejores consejos que esas personas dan para ganarle al día por lo menos una hora, así como las recomendaciones que los expertos en administración del tiempo ofrecen para alcanzar el mismo objetivo:

1. Aproveche sus horas de mayor eficiencia.

¿Cuál es el mejor momento del día para realizar las tareas importantes? El doctor Nathaniel Kleitman, fisiólogo de la Universidad de Chicago, ha señalado en informes de sus observaciones que la temperatura normal del organismo puede variar hasta tres grados durante el día. Tal variación coincide con los altibajos de la eficiencia en el trabajo, la lucidez y la sensación de bienestar.
Remolonear en la cama por la mañana puede significar el desperdicio de valiosos minutos de tiempo productivo. “Hace mucho descubrí un truco que me permite ahorrar entre 20 y 50 minutos al día”, me contó en cierta ocasión un hombre muy trabajador. “Sencillamente me levanto de la cama en cuanto despierto. Quedarse entre las sábanas sólo aplaza lo inevitable y, de todos modos, uno no descansa más permaneciendo acostado otro rato”.
Tendemos a sentirnos más despejados hacia el mediodía y poco antes o poco después de anochecer. En las primeras horas de la tarde aumenta la somnolencia; a eso de las 2 o 3 la eficiencia cae en una especie de “bache”. Después de alcanzar la temperatura corporal máxima, entre las 6 y las 8 de la noche, muchas personas experimentan una disminución en su agudeza mental.
Aproveche sus horas de mayor eficiencia para realizar las tareas difíciles o que exijan creatividad. En las horas de menor concentración, lea el periódico, ordene el escritorio o revise la correspondencia. Adaptar las actividades al grado de lucidez permite lograr más en menos tiempo.

2. Elabore un plan.

¿Viajaría usted en su automóvil a un lugar que no conoce sin consultar un mapa de carreteras? Los expertos en administración del tiempo coinciden en señalar que los minutos más productivos del día son aquellos que se dedican a planificar. Con sólo 20 minutos diarios de organización, usted podría ahorrarse una hora del tiempo adicional que dedica a recordar las tareas pendientes. “No trate de llevar en la mente toda la agenda de sus actividades”, aconseja Lucy Hedrick, autora de Five Days to an Organized Life (“Organice su vida en cinco días”). “Anote lo que deba hacer a fin de tener la cabeza despejada para labores más creativas”.
Elabore diariamente una lista de tareas por hacer. Si anota menos de diez, asigne un grado de prioridad a cada una usando números. Si rebasan de una decena, agrupe las más urgentes y asígneles la letra A; a las medianamente urgentes, la B, y a las menos importantes, la C. O bien, clasifique-las con marcas de distinto color.
En menos de diez minutos, la abogada neoyorquina Christine Beshar, madre de cuatro hijos, hace una lista de todos los quehaceres domésticos del día. Mediante una buena organización, se da tiempo para atender tanto sus deberes familiares como los profesionales, además de seguir participando en actividades de su parroquia y en el patronato de una universidad. Y, por si fuera poco, lo hace todo bien.

3. Clasifique su trabajo de escritorio.

Al decir de Dianna Booher, autora de Cutting Paperwork in the Corporate Culture (“Cómo reducir el trabajo de escritorio en las empresas”), los empresarios dedican muchas horas a redactar, leer, archivar y localizar documentos. Es más, añade la escritora, nunca vuelven a ver gran parte de lo que archivan. Para resolver este problema, acostúmbrese a concentrar la atención exclusivamente en las tareas importantes.
Reúna los documentos que le resulten verdaderamente útiles o necesarios y clasifíquelos de acuerdo con los siguientes encabezados: “Hacer” (tareas por realizar o que hay que encomendar a otros); “Leer” (información de la que es preciso enterarse tan pronto como sea posible), y “Archivar” (documentos por revisar en fechas futuras). Coloque el legajo correspondiente a “Hacer” sobre su escritorio, de preferencia en el centro, y guarde los otros dos en un cajón del mismo o en un archivador. Tener a la vista sólo lo indispensable evita divagaciones inútiles.

4. Procure no recibir visitas a cualquier hora.

A muchas personas les gusta decir que la puerta de su oficina siempre está abierta para todos. Sin embargo, quien recibe a todo aquel que se presenta de improviso, conversa mucho y trabaja poco.
El secreto es discurrir la manera de protegerse de las interrupciones sin ofender a nadie. David Levy, consultor de relaciones públicas internacionales, utiliza una variante de la política de puertas abiertas: deja la suya entreabierta. Así queda claro que en realidad no desea que lo interrumpan, pero que se puede entrar si el asunto es importante.
Otra manera de deshacerse de las visitas inesperadas es ofrecer disculpas por estar tan ocupado y convenir con la persona en verse en una hora de menos trabajo, o durante el periodo en que disminuye su eficiencia.

5. Controle el teléfono.

Hay un cuento de un granjero cuyo teléfono suena sin cesar mientras él conversa con un vecino en la entrada de su casa. Este se impacienta, pero el granjero se limita a cambiarse de lado la pipa. “No haga caso”, le dice. “Mandé conectar ese teléfono para usarlo cuando yo quiera”.
Pocos aparatos pueden ahorrarle más tiempo —o hacérselo perder— que el teléfono. Para cortar telefonemas prolongados, aconseja R. Alee Mackenzie, autor de New Time Management Methods (“Nuevos métodos para administrar el tiempo”), establezca un límite de tiempo y, una vez que haya transcurrido, indique que desea terminar la conversación con una frase como “Antes de colgar…”. Uno puede ahorrar aun más tiempo absteniéndose de contestar todas las llamadas que recibe.
Ahora bien, antes de hacer usted una llamada telefónica, tome providencias. Si va a tratar varios asuntos, anótelos y no se aparte de ellos. Las personas ocupadas agradecen que se les hable sin rodeos. Para evitar que no le contesten, lleve un registro de las horas de menos trabajo de las personas a quienes telefonea con mayor frecuencia. Mejor aún, convenga en llamar a cada una de ellas en cierta fecha y a determinada hora.

6. Mientras espera, trabaje.

Cuando es inevitable tener que esperar, aproveche el tiempo para leer. En un portafolio o una carpeta puede llevar las cartas, informes, minutas y recortes que no ha podido revisar.

7. Haga una pausa. 

Aprovechar el tiempo no significa trabajar sin descanso. Interrumpir el trajín puede ayudarle a desempeñarse mejor y con más rapidez. Una siesta a mediodía, por ejemplo, permite reponer la energía. El ejercicio ayuda  a aclarar la mente y relajar el cuerpo.
Incluso diez minutos de ejercicios de  relajamiento y respiración ayudan a despejarse y reanimarse, asegura Lester Bittel, autor de Right on Time  (“Justo a tiempo”), quien aconseja, tomarse al menos un día de descanso cuando las presiones a causa del  tiempo se prolonguen demasiado.
Para ayudar a sus clientes a ganarle una hora al día, un relojero de Dallas fabricó un reloj en el que los  minutos son de 57.6 segundos. Los  2.4 segundos que se restan a cada minuto suman 60 minutos en un día. Usted puede lograr el mismo resultado administrando su tiempo con más eficacia. Así cosechará todos los frutos de su trabajo.

miércoles, 1 de octubre de 2014


En lugar de creer que Dios puede hacer algo bueno con su situación, muchas personas tienen una reacción negativa ante las adversidades y los problemas.
No estoy diciendo que Dios mande los problemas, pero sí que Dios usará la adversidad que enfrenta para hacer cosas mas grandes en su vida si tan sólo hace su parte y se mantiene firme y fuerte.
La fe hace que Dios cambie su situación y cuando eso sucede es magnífico, se requiere de una mayor confianza y una comunión más profunda con Dios.
Aveces las circunstancias no cambian de inmediato, pero cuando hay fe en Dios entonces decimos: "Dios, no me importa lo que venga contra mí, no me importa cuánto tiempo se tarde, esto no me derrotará. No seré tumbado por esta prueba porque yo sé que Tú estás a mi lado y mientras seas por mí, es lo único que me importa".
La fe es la que le hace atravesar esas noches oscuras del alma cuando no sabe a dónde ir o qué hacer, y al parecer, no puede soportar un día más... pero a causa de su fe en Dios, no solo lo soporta, sino que lo supera.

sábado, 27 de septiembre de 2014

CUANDO UNA MUJER...




“CUANDO UNA MUJER”

Cuando una mujer está callada, millones de cosas dan vueltas por su cabeza. 


Cuando una mujer no está discutiendo, está pensando detenidamente. 

Cuando una mujer te mira con ojos melancólicos, se está preguntando por cuanto tiempo estarás cerca y también se pregunta qué sucederá con ella si te abre su corazón y luego un día decides marcharte.

Cuando una mujer te responde “Estoy bien”, no le creas. Si se lo preguntas por segunda vez y te lo repite, entonces es verdad.

Cuando una mujer te mira fijamente, esta deseando que seas suyo para siempre. 

Cuando una mujer quiere verte todos los días, quiere que la mimes y la sigas enamorando de a poco. 

Cuando una mujer dice “te amo”, eso es exactamente lo que quiere decir, ella no suele regalar esas palabras tan fácilmente a cualquiera.

Cuando una mujer te dice “Te echo de menos”, nadie en este mundo puede extrañarte más que ella. ¿Te parece complicada? Claro que lo es! Es justamente eso lo que la hace irresistible!!

martes, 16 de septiembre de 2014

LO QUE UNA MUJER NO DEBE HACER



LO QUE UNA MUJER NO DEBE HACER
Decir malas palabras: si fueran buenas, ciertamente no necesitarían ser censuradas en la TV, lo que también poco sirve, ya que están en todas partes en la boca de quien no logra una forma mejor de comunicarse;
Hablar y reírse alto: además de ser indiscreto, incomoda mucho al ambiente; es una forma negativa de ser oída y vista;
Mascar chicles: cuando usted dice la palabra mascar, parece que ya está oyendo ese ruido irritante de alguien mascando sin parar - están las que hacen incluso globitos. Totalmente comprensible para un niño o adolescente, pero para una mujer que quiere ser elegante no es recomendado;
No tener postura para caminar y sentarse: no sirve copiar el modelo de ropa de la princesa, si en el momento de sentarse muestra más de lo que debía, deja los breteles del sostén a la vista, o usa escotes enormes…
Ser mandona y autoritaria: las mujeres así tienden a anular a las demás personas. Solo les interesa lo que ellas piensan, lo que les parece o quieren, y el fin de eso es quedarse solo e infeliz;
Ser desactualizada: el mundo ha cambiado demasiado rápido. En el tiempo de nuestros padres, alguien encomendaba un trabajo para el mes siguiente. Hoy, las personas dicen: “para ayer”, este es el mejor plazo. Pero existen mujeres que no intentan acompañar los cambios, insisten en quedarse en el siglo pasado, se enorgullecen en decir que no saben esto o aquello, cuentan sin vergüenza que no tienen ni siquiera e-mail. ¡Eso no está bien!
Ser dependiente de los demás: son inseguras para tomar decisiones, nunca saben hacer nada solas, y existen incluso las que ponen sus responsabilidades sobre otros;
No tener contenido: no les gusta leer, informarse y no invierten en su inteligencia. Lo que dicen no vale la pena guardarlo, pues no agregan nada, lamentablemente;
Ser débil y sensible: ¿de qué sirve ser una mujer linda, pero frágil como porcelana? Basta una palabra un poquito más dura que ya se pone mal, llora… ¿Quién lo aguanta?
Bien, esta lista que sabotea la belleza femenina aún puede crecer mucho, ¿no es así? ¿Y quién sabe si usted se vio equivocándose en algo?
Calma, si llegó hasta aquí, ¿por qué quiere cambiar? El deseo acompañado de actitudes y disciplina es todo lo que se necesita para ser una mujer fuerte y elegante, incapaz de actuar mal incluso en las situaciones más difíciles. Ah, y claro, el aprendizaje nunca termina, ¡continúe firme en su desafío!

jueves, 4 de septiembre de 2014

Historia de Colgate

LA HISTORIA VERÍDICA DE GUILLERMO COLGATE



 
Hace mucho tiempo, un joven de 16 años de edad salió de su hogar para buscar su fortuna. Todo lo que poseía lo tenía envuelto en un pañuelo que llevaba en la mano. Se encontró con un vecino, capitán de un barco, y la charla que con él sostuvo cambió por completo el rumbo de la vida del joven.
"Hola, Guillermo, ¿a dónde vas?"
"No sé," contestó el joven. "Mi papá está demasiado pobre para sostenerme y dice que debo buscar mis propios medios para sostenerme."
"No veo problema en eso,", dijo el capitán. "Si principias bien, resultará bien."
Guillermo dijo al anciano que no sabía otro oficio que hacer velas y jabones.
"Bien," dijo el capitán, "oremos una vez más, te daré un consejo, y luego podrás irte donde quieras."
Los dos se arrodillaron allí en el camino mientras el anciano oró fervorosamente por Guillermo. Después le dio este consejo: "Pronto alguien llegará a ser el mejor fabricante de jabón en Nueva York. Puedes ser tú o bien cualquier otro. Espero que seas tú. Sé un buen hombre, entrega tu corazón a Cristo, paga al Señor todo lo que le pertenece de cada dólar que ganes; fabrica jabón de buena calidad y buen peso; estoy seguro que llegarás a ser un hombre importante, digno y rico."
Al llegar a Nueva York, se acoró del consejo del capitán y "buscó primeramente el reino de Dios". Se unió con una iglesia y luego logró colocarse en una fábrica de jabón. Cuando ganó el primer dólar, apartó diez centavos para el Señor.
Guillermo trabajaba en la fábrica de jabón en Nueva York y cuando recibió su primer salario apartó el diezmo para el Señor. Pocos años después, sus patrones murieron y le dejaron dueño del establecimiento. Una vez más Guillermo pensó en el consejo que le había dado el viejo capitán, y ya siendo dueño de la fábrica se dedicó a fabricar jabón de la mejor calidad y tamaño. Instruyó a su contador que abriera una cuenta para el Señor y depositara allí la décima parte de todas las entradas.
El negocio prosperaba; muchos compraban su jabón, y Guillermo llegó a poseer una gran fortuna. Decidió dar al Señor dos décimas, y prosperó más, luego treinta por ciento, cuarenta, hasta cincuenta por ciento. Entonces apartó una suma para la educación de sus hijos, hizo algunas provisiones para su familia y prometió al Señor darle todas las entradas. El prosperaba como nunca lo había soñado.
Esta es la historia verídica de Guillermo Colgate, quien dio millones de dólares a la causa de Cristo. Murió pero su nombre permanece en la universidad y facultad de teología que fundó con su fortuna, y claro está, en la pasta dental que usamos – la fortuna que Dios le dio en respuesta a su fidelidad.
¿Tú quieres prosperar? entonces busca de Dios y dale al señor los 10% de tus ganancias y ciertamente vas a prosperar...

“LOS VIERNES SIEMPRE SON MUY BUENOS...”


  • “LOS VIERNES SIEMPRE SON MUY BUENOS...”
  • - Mamá…¿Qué haces cuando la persona que mas necesitas es la que mas lejos está de ti?
  • - La distancia no significa nada, hija, cuando alguien significa todo.
  • - No me refería a que está lejos geográficamente, sino que no puede estar tan cerca de mí como quisiera.
  • - ¿Te enamoraste?
  • - No lo se…la verdad es que me molesta sentir tantas cosas. Es increíble como una persona te puede cambiar el estado de ánimo. El tiene ese extraño poder, una palabra suya, un gesto…y siento que cambia mi día.
  • - Uf! Se algo de eso. ¿Sientes que te entiende?
  • - Como ninguna otra persona en este mundo!
  • - Y bueno…amar es encontrar a alguien que te entienda sin dar demasiadas explicaciones. ¿Eso es lo que te molesta?
  • - No se si me molesta…mas bien me enamora.
  • - Un gran hombre es ese alguien que despoja despacito tus secretos...es un señor, más que todo un ser humano que como nosotras tienen sus historias pasadas, bien o mal vividas. Un verdadero caballero no te quita la ropa, sino que te va robando los secretos que creías tener muy guardados, hasta que un día te deja con el corazón expuesto, desnudo.
  • - ¿Y eso es malo?
  • - Según quien sea. Cuando logra llegar a tu corazón, ya no hay mucho que puedas hacer. Por eso ruego que sea un caballero.
  • - ¿Lo dices por papá?
  • - Lo digo por todos los hombres. Aunque tu padre era muy especial.
  • - Cuando las mujeres decimos “muy especial” es porque hay cosas que no nos gustan.
  • - Hija, nadie es perfecto; ser hombre es…buscar dentro de su corazón el sentimiento que lo hace un caballero. Cuando encuentres al tuyo, te hará sentir sublime, amada. Todo lo demás, no tiene importancia.
  • - Y pensar que yo me prometí a mi misma que jamás me iba a volver a enamorar!
  • - Jaja, no puedes prometerte eso! No es algo que puedes manejar o razonar, hija. Ojalá fuese una decisión que se toma con la mente. El corazón es el que decide. Si eres difícil para enamorarte, la vida me ha enseñado lo que es la perseverancia de un buen hombre. “Si una gota de agua que insiste logra penetrar una roca, de forma inevitable se cuela por la más insignificante grieta y aunque la roca no quiera, logrará…
  • - …Bañar su corazón!” Conozco la frase. Eso solía decirlo papá.
  • - El si fue un hombre perseverante, de esos que sin apuro…van adueñándose de a poquito de tus sentimientos, como un intruso, de esos que un día te dicen: “¿Señorita, sería tan amable de dejarme poner mi bolso en este rinconcito de su corazón?” y tu muy ingenua le respondes: “Claro, no puedo negarle eso a nadie”, pero luego de unos meses, se termina adueñando de todo y tu te preguntas ¿Cómo lo logró?
  • Un hombre apurado no logrará mucho, pero si realmente se toma su tiempo…logrará tenerte. No quedan muchos hombres así, son especies en extinción.
  • - ¿Papá era así?
  • - Tu papá era un niño.
  • - ¿Por?
  • - Porque la mayoría de los hombres siguen siendo niños. Sienten temores, tiemblan cuando nadie los ve, les gusta ser el centro de atención de la mujer que robó su corazón. Y así como son niños, te bajan la luna si desean conquistarte, bajan estrellas, no anotan fechas, olvidan aniversarios, son distraídos, pero con una mirada al alma te llevan hasta el cielo.
  • - ¿Y si luego me rompe el corazón? ¿Y si algún día me defrauda?
  • - Es un riesgo que las mujeres debemos correr. Si lo que te pasa es que tienes miedo, solo puedo decirte que si no pruebas no lo sabrás nunca. Tu padre solía decir: “¿Cómo vas a extrañar mis besos si no sabes cual es el sabor de mi boca? ¿Cómo vas a extrañar mis abrazos si no sabes como aprieto? ¿Cómo vas a extrañar olerme si no sabes cual es mi aroma? ¿Cómo vas a buscar refugiarte en mis brazos cuando el despertador suene si no estoy contigo en la mañana? ¿Cómo vas a extrañar mi saludo y mi regreso si ni siquiera me he despedido de ti?”
  • - Todo un poeta papá…¿estuviste perdidamente enamorada de el?
  • - ¿Acaso las mujeres sabemos amar de otra forma? A diferencia de algunos hombres, las mujeres no nos “enamoramos un poquito” ni tampoco “amamos a medias”. Eso es justamente lo que pone en constante peligro a nuestro corazón. Claro que lo amé perdidamente! Por eso, si realmente amas a este hombre, no dejes de hacérselo notar; estoy segura que el lo está necesitando.
  • - ¿ “El” lo está necesitando? ¿Ni siquiera sabes quien es y resulta que ahora estás de su lado? Yo soy tu hija! ¿Lo recuerdas?
  • - Es que si ese hombre, sea quien sea, logró llegar a tu corazón, es alguien que merece tenerlo y punto.
  • - ¿Y “punto”? ¿Así resuelves las cosas? ¿Te vengo a contar que me siento confundida y tu solo me dices que a el le hace falta mi amor? ¿Y lo que yo siento no importa?
  • - Lo que tu sientes ya no tiene vuelta atrás. Es que conozco esa mirada y conozco a mi propia hija. No estás confundida, estás enamorada hasta el alma y no hay mucho mas que hacer, solo decírselo. Sea que te rompa el corazón o te lo cuide por el resto de tu vida…ya no es tuyo.
  • - En realidad entre nosotros nunca pasó nada, pero siempre hubo algo. Hay algo que ambos sentimos, que está allí, en el aire. Cuando yo le hablo, el me hace sentir que en ese momento no hay nada mas importante en todo el universo que aquello que le estoy diciendo. Está pendiente del mas mínimo detalle.
  • - Me sigues hablando así de el y me termino enamorando yo!
  • - Mamá!!!
  • - A propósito, ¿qué día es hoy?
  • - Viernes ¿por?
  • - Los viernes siempre son muy buenos para decir “Te amo”.

martes, 2 de septiembre de 2014

Bajo La Misma Estrella

Bajo la misma estrella


Bajo la misma estrella (título original en inglésThe Fault in Our Stars) es una novela escrita por John Green -la sexta en su carrera como autor-, publicada en enero de 2012. La historia es narrada por una adolescente de dieciséis años de edad llamada Hazel Grace Lancaster, que padece cáncer de pulmón, que se ve obligada por sus padres a concurrir a un grupo de apoyo para jóvenes afectados por la enfermedad, en el cual conoce y se enamora de un joven llamado Augustus Waters, exjugador de baloncesto que tiene amputada una pierna a causa del osteosarcoma.
Green expresa que el título del libro fue inspirado por la famosa frase de Julio César, de William Shakespeare cuando Casio en el Acto 1/Escena 2 de la obra le dice a Bruto «¡La culpa, querido Bruto, no es de nuestras estrellas, sino de nosotros mismos, que consentimos en ser inferiores!».1
La adaptación cinematográfica de la novela, de nombre homónimo, fue estrenada el 6 de junio de 2014 en Estados Unidos. Está protagonizada por Shailene Woodley y Ansel Elgort. El estreno en España fue el 4 de julio, mientras que en varios países de Latinoamérica su estreno tuvo lugar a fines de junio.


Hazel Grace Lancaster fue diagnosticada con cáncer de tiroides fase IV que se expande a los pulmones, pero se las arregló para sobrevivir más de lo esperado utilizando un medicamento experimental llamado Phalanxifor. En el grupo de apoyo de chicos que padecen algún tipo de enfermedad oncológica, conoce casualmente a Augustus Waters (también llamado Gus), un joven muy bueno en el baloncesto aunque odiaba el juego, que perdió su pierna derecha por culpa de un osteosarcoma, y ahora está en remisión. Hazel lo convence de leer Un dolor imperial, su libro favorito, el cual, dado su gran tiempo libre al no tener que asistir obligatoriamente todos los días a la universidad, relee constantemente. Gracias a mensajes y llamadas, su relación cada día fue mejorando. Gus consigue la dirección de correo electrónico de la asistente de Peter Van Houten (el autor de Un dolor imperial), Lidewij Vliegenthart, y junto con Hazel le escriben cartas al autor. Él les responde que no les dirá que ocurre después del final de Un dolor imperial a no ser que se vean en persona. Gus había guardado el deseo que la fundación The Genies les entrega a los niños con cáncer y decide usarlo para viajar con Hazel a Ámsterdam para conocer al autor de Un dolor imperial. Hazel está muy feliz por el viaje, pero también decide que no quiere que ella y Gus sean más que amigos, (para cortar el dolor que podría causarle cuando ella muera, ya que la anterior novia de Gus había muerto por cáncer), definiéndose a sí misma como una granada, que en cualquier momento puede "explotar" y hacer sufrir a todos sus seres queridos tras su muerte. Los padres de Hazel comienzan a preocuparse mucho por ella, ya que no quieren que su hija piense eso de sí misma, deseando tan solo lo mejor para ella.
Una noche Hazel se despierta con un dolor fuerte en la cabeza. Ella pensaba que era un tumor, porque el cáncer se podía expandir, pero sólo fue la falta de oxígeno y el líquido en sus pulmones el que ocasionó todo. Hazel es internada en la UCI. Después de recibir el alta y algunas consultas a sus doctores, Hazel consigue el permiso para viajar a Ámsterdam con su madre y con Gus. En el viaje de ida a Ámsterdam, Gus confiesa a Hazel que está enamorado de ella y Hazel queda sorprendida pero no puede decirle que ella también lo ama por miedo a lastimarlo en un futuro cuando ella muera. En la primera noche en Ámsterdam, Hazel y Gus van a comer a un restaurante llamado Oranjee, todo por supuesta invitación y cortesía de Van Houten. Al día siguiente, se encuentran con el autor, y se descubre que su asistente, Lidewij, armó todo sin el conocimiento de Van Houten con las esperanzas de que todo esto lo motivara para dejar de ser un alcohólico y volver a escribir. Molestos por el comportamiento grosero de Van Houten, se retiran de su casa. Al rato Lidewij Vliegenthart los alcanza y se dirigen a la Casa de Ana Frank, donde Hazel y Gus se besan por primera vez, recibiendo el aplauso de los visitantes que allí estaban. Cuando regresan al hotel, y al ver que la madre de Hazel no se encuentra, ambos tienen relaciones sexuales por primera vez. Al siguiente día, Gus aprovecha para contarle a Hazel de que su cáncer ha vuelto, haciendo metástasis en varias partes de su cuerpo, y que aunque lo traten con un régimen intensivo, sus esperanzas de vida son muy pocas.
Poco tiempo después, Gus le pide a su mejor amigo, Isaac, y a Hazel que le hagan un pre-funeral en el cual les pide que escriban un discurso, simulando un velatorio. Ocho días después, Augustus Waters muere. En medio del funeral Hazel se encuentra con Van Houten, quien le explica que fue Augustus Waters quien le insistió en que asistiera a su funeral, confesando que él tuvo una hija que murió hace muchos años de cáncer. Ella fue su inspiración para el personaje principal, Anna, de Un dolor imperial, y, que su grosería se debía en parte a que ella fue vestida idéntica a Anna. Isaac le confiesa a Hazel que Gus estaba escribiéndole algo en sus últimos días, pero no se encuentra ningún rastro de lo que él estaba escribiendo, excepto cuatro hojas que habían sido arrancadas de una libreta de Gus. Hazel se contacta con Lidewij, quien va en busca de las hojas perdidas a la casa del autor, encontrándolas y enviándoselas a Hazel a través de un correo electrónico. Gus había escrito algunos párrafos sueltos y se los envió al autor con la esperanza de que este pudiera convertirlos en un discurso fúnebre en caso de que Hazel falleciera antes.